Propósitos de año nuevo

Cada año nuevo nos ponemos nuevos propósitos para ser mejores, intentar corregir los defectos y potenciar las virtudes. Un año nuevo puede ser conducente de muchos modos; puede ser “un año más” o  puede ser, también la puerta hacia nuevas oportunidades, un nuevo regalo, tierra fértil esperando ser sembrada… Nuestros días no son solo números en el calendario; son espacios para crecer. Merecen ser fructíferos y que al final de cada uno podamos sentirnos contentos por el amor que hemos dado, teniendo en mente aquella frase  de Santa Teresa de Calcuta: «No permitas jamás que alguien venga a ti y se aleje sin ser mejor y más feliz».

El final de un año y el  inicio de uno nuevo, es una oportunidad para revisar nuestra vida, para hacer un balance de los logros y los retos por superar, y plantearnos metas y propósitos en lo personal y profesional. Por supuesto, es igualmente una gran ocasión para que los esposos puedan celebrar los frutos de su amor, paciencia y compromiso; de reflexionar sobre las dificultades que enfrentaron a lo largo del año y pensar juntos en estrategias para superarlos, y avivar el amor en su matrimonio.

Muchas veces,  las listas de propósitos suelen reducirse a aspectos materiales: un nuevo auto, hacer el viaje jamás realizado, tener una casa más grande, un mayor sueldo… Tener estas cosas en mente está bien si los vemos como medios para algo más importante, como el dar un mayor bienestar a la familia. Sin embargo, hay que considerar que en la relación entre esposos son fundamentales los aspectos no materiales que son los catalizadores de la confianza, la cercanía, la fortaleza y el amor.Es fácil caer en la rutina y olvidar que el año trae  365 oportunidades de crecimiento juntos. Por eso es es importante tomar un tiempo para  analizar si se han cumplido las promesas dadas.

Abrir un nuevo ciclo nos brinda la posibilidad de adquirir hábitos nuevos y eliminar algunos que ya no nos funcionan para así renovar y fortalecer nuestros matrimonios. A continuación te presentamos algunas opciones para hacerlo en 2017.

1.- Identificar áreas a mejorar

Que los dos estén abiertos a mejorar es esencial, porque el proceso  puede ser todo un reto y hacernos  sentir vulnerables. Pero vale la pena el esfuerzo: tener la valentía de hacer conciencia de las cosas que nos molestan o hemos omitido para luego conversarlas en pareja redefinirlas y cambiarlas, es el primer paso para construir caminos para el  crecimiento y la superación de obstáculos. El cambio en la pareja se consigue partiendo primero  del el cambio personal ya que la mayor frustración es querer cambiar al otro.

Una buena forma de empezar es hacer preguntas que provoquen conversaciones generadoras de acciones de mejora, por ejemplo: ¿Qué hay en mí que saca lo mejor de ti, y qué hay en mí que saca lo peor de ti? Hay que escuchar  y evitar reaccionar a la defensiva. así podrán iniciar un proceso de cambio de conducta.

Un cambio de conducta implica:

1. Hacer consciente la acción a cambiar.
2. Definir las estrategias concretas que la reemplazarán
3. Llevarlas a cabo muy puntualmente y registrar los logros diarios. Luego de un tiempo descubrirás que ya no es necesario revisarlo porque se ha convertido en un nuevo hábito de una nueva actitud en tu matrimonio.

2. Aprender a escucharse

Uno de los grandes pilares de la comunicación es la calidad de la escucha.  ¿Te ha pasado que a veces escuchas hablar a tu pareja pero realmente no le prestas atención? Para lograr una escucha más atenta es importante eliminar nuestro ruido interno, pues en lugar de captar el mensaje completo de lo que escuchamos, estamos pensando en otra cosa, incluso en la respuesta que vamos a dar o en completar la frase del otro, pues damos por sentado lo que el otro está sintiendo y no escuchamos lo que nos quiere decir.

Para mejorar tu escucha:

1. Deja de hacer lo que estés haciendo y dedica toda tu atención a sus palabras.,
2. Ejercítate en escuchar más allá de las palabras: observa la posición corporal, el volumen y tonos de voz, los espacios silenciosos.
3. Practica validar lo que escuchas de tu pareja  repitiendo brevemente los puntos que tú crees que son importantes de lo que te dijo.
4. Discierne entre los hechos y los sentimientos, identifica  las peticiones, los deseos y las necesidades.

Puede ser que al inicio escuchar activamente resulte complejo, pero ¡ánimo! Es cuestión de practicarlo.

Continuará….

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